21 de febrero de 2013

Football Manager




Paso las mañanas pensando si el 4-4-2 es mas eficiente que el 3-5-2, entonces el secretario de acuerdos vocea mi audiencia y retorno a la realidad. En mis ratos libres preciso si Julio César Olmos, esa joya que salió de la cantera del Villarreal y que en el 2018 la está rompiendo en La Liga, no me vaya a cambiar por el Real Madrid o el Paris St. Germain; Se que Bryan Domínguez, ese portero mexicano que salió de la nada tiene las aptitudes para competirle a Stephan Hamborsturian, el arquero francés nacido en Armenia que ha ganado el “Zamora” por dos años consecutivos, eso me duele, por que a Stephan lo aprecio mucho y al pobre de Bryan no le quedará de otra que comer banquillo.

Mientras mi novia me exige que la lleve a comer un helado de 80 pesos yo pienso que Etiene Capoue me costó una millonada y no ha desquitado lo que se pagó por el, mientras que el  (ya no tan) “Niño” Torres a pesar de sus 34 años sigue haciendo goles como los que nunca hizo con el Chelsea. Las clausulas de recisión obligatorias me dan dolor de cabeza. José del Pilar y Pedro Pablo Galera abandonaron el barco (o submarino) por equipos con mayor reputación, risa me dio cuando, después de 4 años y un ascenso, gané La Liga contra todo pronóstico.   

Estoy contestando una demanda, y en lugar de pensar en la excepción adecuada para refutar al rufian que demanda a la empresa para la que laboró 20 años y lo despidió sin contemplaciones, estoy pensando en que mi próximo encuentro es de Champions League, nunca había dirigido en la máxima competición europea y me emociona pensarlo.

Llevo una doble vida. Por las mañanas soy abogado y en mis ratos libres D.T. de fútbol. Comencé mi carrera dirigiendo al Santos laguna, el equipo de mis amores. Gané una Liga MX, un campeón de campeones y una Concachampions, además de quedar en tercer lugar en el mundial de clubes. Eso me valió el derecho de emigrar a Europa, Alemania para ser exactos. No duré ni seis meses en el Hoffenheim.

Afortunadamente el Villarreal, en segunda, me dio la oportunidad. Y no los defraudé.  6 años trabajé para que ese equipo llegará a lo mas alto, gané una Copa del Rey, una Liga y una Europa League. Me sentí mas orgulloso que cuando llegó aquel laudo absolutorio que habíamos litigado.

Hoy llegó mi oportunidad de oro, el A.C. Milán me ofreció un contrato. Y yo, en el Football Manager estoy en la elite de mi profesión. 

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